martes, 28 de abril de 2009

La batalla de cada año


Aquí estamos después de un fin de semana algo ajetreado y de una perspectiva de lo más agotadora: todo un puto Viña Rock
El finde bien, como deben ser los findes, con una nueva canción cocinándose en la mente del Payo de Ono que suena increíble; una comida familiar abundante y bien regada; una fiesta de chupitos, donde la verdad es que no ocurrió nada reseñable, y aunque la ingesta de tequila fue interesante pero no llegó a espectacular; y es que había cosas que hacer al día siguiente, como ser padrino de una niña preciosa. Y aunque que llegué justo de tiempo, el bautizo estuvo cojonuten.
Tan cojonuten que al día siguiente en el trabajo no me encontraba nada bien. Me limité a arrastrarme por los rincones y no dejarme ver demasiado, sabiendo que este martes comenzaba e Viña Rock para mi. Desde hoy hasta no se cuando exactamente ( no voy a decir que hasta el domingo por que si me hago a la idea y luego no es así me encabronaré bastante) estaré por ahí, andando sin parar, como Forrest Gump, alrededor del recinto.
Porque si el año pasado lo pasé metido en una caseta coordinando horarios y gente, éste promete caminatas de aquí a la luna.
Las primeras hordas invasoras han plantado sus tiendas justo delante de nuestras fronteras, y aunque sabemos exactamente la hora del ataque, no dejamos de sentir respeto, e incluso miedo del invasor, aún a pesar de que parece que este año será inferior su número.
A todos lo que vengáis espero que veros por ahí, a los que no, no se si envidiaros, la verdad...
PD - Recuerdo de la fiesta una interesante discusión acerca de qué preferíamos, el Nesquik o el Cola Cao...

1 comentario:

ReyTormenta dijo...

por aqui arriba ya tenemos rulotes desde el lunes. La invasión ha comenzado y su hedor se nota en el ambiente... Los ajenos al aseo personal se empiezan a mostrar, además de wateres portatiles habria que poner un tunel de lavado para los insurrectos...

Otias!!!!