martes, 3 de junio de 2008

Punto muerto


Hace poco iba detrás de uno de esos todoterrenos enormes que están tanto de moda. Llevába un rato detrás del monstruo de metal, llegando a la Avenida de los Catholic Kings, cuando de pronto, el capullo del todoterreno reduce la marcha de 40 a casi 10. ¡El hijoputa puso el coche en primera!. Pensareis que se le cruzó un cochecito de bebé, o que se acordó de que se había dejado el gas abierto, o sufría de espasmos, o su puta madre borracha, pues no, sin mediar más señal, o aviso o nada de nada el tío frenó de esa manera porque venía uno de esos baches que hay en la calzada para evitar que la gente corra. Cojones, que llevas una máquina hecha para subir al Himalaya en segunda ¿Te preocupa una mierda de elevación? Vete a devolver el coche y cómprate un triciclo, jilipollas. Pero lo que me jode no es lo de ese tío, sino el que casi toooodo el mundo reaccione igual ante una cosa de esas. No lo entiendo. Eso está puesto para gente que va a toda ostia, a fin de que vuelvan a una velocidad normal de circulación en ciudad, que según el código de circulación oscila entre 20 y 30 km/h, para nada el puto punto muerto que te mete la gente en cuanto ve llegar una de esas elevaciones, clavandote en el sitio de golpe. Deben pensar que si lo pasan a una velocidad normal saltará un sensor y automaticamente su cabeza estallará en mil pedazos como en Scanners. Si los amortiguadores no pudieran con ese pequeño bache no los pondrían, estúpidos, lo que si es peligroso es que freneis así. Sobre todo si voy yo detrás, joputas.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Cuanta razon tienes. Si señor, mas que un santo

Anónimo dijo...

Si eske van komo lokos...