La leyenda renace a base de ostias

Cartelaco de la próxima película de Batman, "The Dark Knight Rises", o como se llamará por aquí, "El Caballero oscuro: la leyenda renace", la última de la trilogía de Christopher Nolan, en la que parece que el villano de turno, Bane, le mete una paliza de esas que hacen historia.

El tal Bane ya aparecía en el cine como gigantón al servicio de Hiedra Venenosa/Uma Thurman en aquella fantasía kitsch ultragay que era “Batman y Robin”. En el cómic se hizo un nombre como “el hombre que rompió al murciélago”, al partirle la espalda y obligarlo a buscar un sustituto, en una saga que no dejaba de ser una vuelta de tuerca a ostia limpia que no me gustó demasiado.

Dice el propio Nolan que es la película más bestia de las tres, y que no ha tratado de rebajar para nada la brutalidad de un personaje salvaje como Bane, que aumenta su poder físico mediante un suero inoculado directamente en el bulbo raquídeo. Las desventajas de tan directo procedimiento sobre la inestable psique del hombre consisten en una bajada evolutiva importante, vamos, que se vuelve más animal que nunca, problemas de la potencia sin control.

Quiropráctica al estilo Batman

Donde irá la franquicia del murciélago después no lo sé. A pesar del entusiasmo de muchos fans (como yo) ante la anterior entrega, he podido leer por ahí, con asombro, críticas feroces al enfoque Nolan de la mitología de Batman. Por aquí no me canso de repetir que me parece una película bestial, una revisión cruda y adaptada a nuestra época escéptica y casi apocalíptica que funciona a la perfección, brillando especialmente con ese Joker desquiciado y consecuente como pocos. Madura y consecuente con cada papel. Para gustos los colores, claro, a pesar de que este fin de semana he visto una vez más THE DARK NIGHT, esta vez en espectacular bluray y constato mi opinión de obra maestra arrogante, insultante y estratosférica en comparación con cualquier otra película de Batman, hecha o venidera, o simplemente de acción si apuramos.

Catwoman dibujada por Adam Hughes...bufff

Por ahora la única pega consiste en Anne Hathaway, la actriz más mojigata y sosa del universo. Que sea elegida para encarnar a la ultra sexy Catwoman es un misterio para todo el mundo ¿Presiones del estudio, de los managers, habilidades bucales insospechadas? No sería la primera vez, ni la última, que tenemos que sufrir la meteórica carrera de una actriz que deja mucho que desear (¿Os acordáis de Jennifer López?) quién sabe. Sería como si en su día se hubiera contratado a Julie Andrews, compañera de la Hathaway en aquella pastelada de “Princesa por sorpresa”, para enfundarse el cuero.

La pequeña parte femenina de los repartos de las anteriores pelis de la saga ya dejaba bastante que desear, con actrices sosainas sin carisma alguno como Katie Holmes o Maggie Gyllenhaal. ¿Pensará Christopher Nolan que no debe distraernos de la cruzada oscura con una mujer interesante, y por qué no, atractiva? ¿O simplemente, como les ocurre a muchos directores de acción, no sabe que hacer con ellas? ¿Por qué dejar que la estupenda Marion Cotillard interprete a una ejecutiva de Wayne Enterprises y no ponerle el cuero gatuno? Se rumorea la aparición de la siempre exótica Talia Al Ghul , el eterno amor de nuestro héroe (al que daba un hijo en aquel lejano “El hijo del demonio”)¿Será Cotillard la jefa de la Liga de las Sombras? Interesante opción…

Teaser poster de la peli

A pesar de que hace siglos que no sigo la actualidad comiquera de Batman, y dicen por ahí que el reboot no le está sentando nada bien, la carrera de Batman goza de excelente salud en el mundo del videojuego, donde la reciente entrega Batman: Arkham City engrandece el anterior título ya de por sí imprescindible, Arkham Asylum, y lanza a nuestro murciélago favorito a una ciudad oscura, lóbrega, gótica y viva, que bulle llena de peligrosos matones, psicópatas muy creativos y montones de armas y gadgets a tu disposición.

Y si, en los juegos, Bane es un gorila más a las órdenes del siempre necesariamente inestable Joker.